Seleccionar página

EL HOMBRE DE ACERO

o ¡ups!, Zack Snyder lo hizo otra vez

(segunda parte)

Adrián «Pok» Manero

Pasando a lo realmente importante, la historia tiene muchos puntos y mensajes que francamente me molestan. Además del trasfondo cristiano que ya mencioné, hay una fuerte postura pro milicia. El ejército desempeña un papel muy importante durante toda la cinta. Siento que apoya implícitamente la costumbre intervencionista de los EEUU. El final lo deja claro: pueden confiar en mí porque soy más gringo que el pay de manzana. No me pueden controlar, no me pueden detener, si quisiera me los chingo, pero tranquilos: soy Superman, tengan confianza. Es básicamente lo que dice el POTUS en turno a cualquier país invadido cuyos intereses “salvaguardan”. Doctrina Monroe Redux: América (y el resto del mundo) para los (norte)americanos.

En Kryptón, siento que le falta profundidad. No se muestran facciones políticas claras y definidas (como han aparecido en varios comics), sólo 3 bandos de fanáticos fundamentalistas luchando entre sí. Por un lado los del Consejo, que imponen sus tradiciones y oprimen a cualquier opositor. Por otro, Zod, quien se radicaliza e intenta un golpe de Estado al luchar por lo que considera correcto, aunque mostrado de una forma muy simplista, sin profunididad (más sobre este punto a continuación); quiere llevar a cabo una especie de programa eugenésico porque nunca está de más darle toques de Nazi al villano, para hacerlo más malo. Y por último, Jor-El, que desafía la tradición, traiciona a su gente, roba la calaquita esa (¿De dónde salió? ¿Eso qué?) e impone su santa voluntad por sus creencias. Incluso su esposa está dispuesta a seguirlo ciegamente, yendo en contra de sus instintos. Menudos científicos resultaron ser (ah, y para ser científico, es un excelente luchador y tirador).

MOS8

El fantasma de su padre alienígena le dice a Kal que, para contradecir la voluntad de los kryptonianos (muy a la Brave New World de Huxley) de imponer el destino de sus ciudadanos aun antes de nacer, DEBE CONVERTIRSE EN LO QUE ÉL DECIDIÓ DE ANTEMANO QUE SERÍA SU DESTINO. ¿Es en serio? Y Clark, como buen zonzo que es, cae redondito y ni cuenta se da de que los están manipulando.

También está el trasfondo de los inmigrantes: hay inmigrantes buenos, que son blancos, bonitos y se apegan a nuestro modo de vida. Pero los que quieren conservar sus costumbres, seguramente quieren imponerlas y destruirnos, son malos y hay que acabar con ellos. Y los gringos siguen sin darse cuenta que ellos fueron inmigrantes “malos”, ocuparon el territorio a colonizar y exterminaron a quienes lo habitaban. Tal vez por eso le tienen tanto miedo a los que vienen de fuera, su consciencia culpable los hace temer que la historia se repita.

Se supone que el héroe pretende salvar vidas, pero hace un pésimo trabajo en ello. Primero, cuando debe destruir el aparato en India, se toma su tiempo. Parece que está jugando, ¡a que no me atrapas! ¡Wheee! ¡Ay, me atrapaste! ¡Ya me zafé! Mientras todo el tiempo, en teoría, se está debilitando. Tras unos cuantos trancazos, varios minutos y destrucción catastrófica del otro lado del globo, como que dice: “Bueno, ya, ahora sí”, y de un solo golpe rompe la cosa esa. ¿Por qué no lo hizo desde un principio?

Luego regresa a una Metropolis devastada, donde Lois le dice: “Gracias, nos salvaste…” Le faltó agregar: “A estos 3 tipos y a mí”, porque no se ve nadie más alrededor. Entonces Zod sigue vivo y es como si dijeran: “¡Hey, mira! Esa parte de la ciudad sigue entera, ¡vamos a destrozarla!” Luego salen volando al espacio, destruyen un satélite nomás porque sí, de manera gratuita y, cuando vuelven a la Tierra, por qué no, caen nuevamente en Metropolis (con todo y escombros de satélite en llamas), en una parte que seguía intacta. Caen más edificios, explotan más cosas (nunca falta una pipa de gas, que aunque diga LexCorp es irrelevante).

Volviendo a Zod, intentan darle tantita dimensión al hacerlo una especie de zelote, un guerrero dispuesto a cometer las atrocidades que sean necesarias para hacer lo que él considera acorde a sus principios. Pero no dejan de mostrarlo como un villano hipócrita y desalmado. El principal problema con esto es que Superman es exactamente igual: para proteger a “su gente”, está dispuesto a llegar al extremo y matar a su enemigo, convirtiéndose en lo mismo que intenta combatir. Pero claro, como es el bueno, se vale. No hay reflexión, no hay cuestionamiento, nada.

MOS9Y por último, cuando Superman ya tiene a Zod agarrado por el cuello, éste le anuncia que va a matar a las personas que tiene enfrente. Se la canta con mucha anticipación, le dice si tanto los quieres, te voy a hacer chillar, de veras los voy a matar, mira cómo lo hago… Hasta parece que no quiere matarlos… Digo, la visión calorífica se dispara apuntando la mirada, no la cabeza (yo supongo), pero alargan el momento hasta el cansancio para que veamos como sufre Clark y Zod “lo obliga” a matarlo. ¿De verdad? ¿No podía aventarlo, empujarlo, sumirlo en el piso, jalarlo hacia arriba, algo? ¿Esa era la única alternativa? No me la creo. Si bien no voy a usar el argumento de “Superman no mata” (porque ha matado en los comics, al mismo personaje, de hecho) o bien “los superhéroes no matan” (pues el dilema moral tiene mucha riqueza y potencial de reflexión), soy más de la idea de que “Superman siempre encuentra cómo”. Digo, ¡es Superman, carajo!

Se supone que su emblema representa la Esperanza, con E mayúscula… Qué triste es la realidad de un país que genera historias en que la “esperanza” es convertirte en el mismo mal que combates y tener que matar a tu enemigo. Superman debería representar lo mejor que hay en nosotros y no verse reducido a eso, al menos no en su primera película.

En resumen, me parece demasiado gringa, plana y con muchas fallas. Creo que sería mucho mejor si cualquier persona, de cualquier nacionalidad, pudiera verse reflejada en ella. Que Superman fuera más “man” y menos “american”, algo más universal, con mayor resonancia.

****

pok2Adrián “Pok” Manero, tras años como lector asiduo, decidió que el siguiente paso en su manía consistía en elaborar sus propias ficciones. Se dedica compulsivamente a leer comics y libros y a ver películas, quisiera ser como los gatos y disfruta escribiendo sobre sí mismo en tercera persona.  vinetaspalabrasyfotogramas.blogspot.com