UN EVENTO EXTRAORDINARIO

Vanessa Puga

 

Quizás hayan notado algo en mis columnas: leo a más mujeres que a hombres. Si bien no es que esté peleada con los autores, llevo años de navegar más hacia las autoras. Son pocas las veces que los autores me agradan cuando representan a mujeres en sus letras. Alguien que lo logra muy bien es Alberto Chimal en su novela La noche en la zona M. Otro autor que me sorprendió tremendamente fue Hank Green, de quien les quiero platicar el día de hoy.

En diciembre del año pasado, mi mejor amigo me regaló un libro de un autor que él admira. Hank Green, hermano del galardonado John Green, es reconocido como emprendedor y vlogger. Tiene un canal de YouTube con John y un podcast que a mi mejor amigo le encanta. Quizá por eso le importaba tanto que yo me acercara a conocerlo, y qué mejor forma de hacerlo que con una buena historia.

El libro en cuestión, An Absolutely Remarkable Thing, era el inicio de una aventura fantástica. Traducida (pésimamente) como Esto te va a sorprender, la novela nos lanza a conocer a April May, una chica neoyorkina que por un evento extraño acaba siendo viral y reconocida mundialmente.

April trabaja casi a destajo en una empresa start-up como diseñadora. A pesar de que estudió en el colegio de Artes, se especializó en Diseño en general y acabó ahí. A sus 23 años, con la vida por delante, se siente atorada en dicho trabajo. Un día, o más bien una madrugada, cuando va a regreso a su casa, se topa con una gran estatua de un material que no reconoce, plantificada a la mitad de la calle. Nadie parece detenerse a observarla, aunque claro, son las 2 a.m. April decide marcarle a su mejor amigo, Andy, para que venga a grabar un video con ella. Así, ella aparece en el video saludando a la estatua y nombrándola Carl. El video acaba en YouTube y April despierta para saber que es viral.

No es viral por el video tan sencillo, sino porque es la primera en reportar a uno de los 64 Carls que aparecen en 64 ciudades de todo el mundo (por supuesto, al ser novela gringa, al menos dos de las ciudades son en EEUU: New York y Los Ángeles). Así inicia una aventura no sólo para averiguar qué misterio hay detrás de los Carls: ¿Son extraterrestres? ¿Es un pop up de arte? ¿Por qué son inamovibles?; sino también una aventura por ser el más famoso.

April, quien antes evitaba las redes sociales, se convierte en influencer adicta a las redes sociales y a tener una imagen pública como vocera de la bondad de que los Carls hayan llegado a nuestras vidas.

Mitad fantasía, mitad crítica al mundo del Social Media, esta novela es narrada en primera persona. Desde los ojos de April, quien al inicio nos dice que va a ser completamente honesta, nos enteramos de toda la historia. Esto incluye, cumpliendo con su palabra, las cosas más terribles que April llega a hacer por dinero y fama.

La protagonista es insoportable. No lo puedo poner de otra forma: narcisista, pesada, con miedo al compromiso. Podría ser un fuckboy (y entonces Green no lo habría hecho bien), de no ser porque también es vulnerable, honesta y desbordada por emociones. En su acercamiento a lo que sería la psique de una joven en sus early-twenties, Green logra hacer una exploración de cómo la fama instantánea de las redes sociales nos recalibra el cerebro y cómo el dinero puede modificar muchas cosas. Debo confesar que fui gratamente sorprendida, puesto que normalmente cuando los protagonistas me caen mal, no logro avanzar fácilmente con las lecturas. Empero, April tiene un humor ácido que, con todo y sus errores narcisistas, me hicieron querer seguir leyendo.

Creo que, como fábula, en especial para los jóvenes, funciona bastante bien. Además, es ese tipo de fantasía con un pie en lo normal y un pie en la ciencia ficción que me puede encantar.

Si tienen oportunidad de conseguirla, háganlo y cuéntenme qué les parece.

Probablemente acaben tan sorprendidos como yo.

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Vanessa Puga

También responde al nombre de Nerea o al apelativo de bruja. Dicen que nació en la Ciudad de México, pero ella sospecha que la inventaron las novelas de fantasía y aventura en un mundo que no le corresponde. Tiene un serio crush con lo creepy. Ávida lectora y escritora —de preferencia a mano, con letra cursiva y tintas de colores—, es imán de geeks aunque no entienda todos los fandoms. Hornea panqués cuando está excesivamente estresada.