Seleccionar página

FEBRERO

2023

 

Alma Mancilla

 

Para febrero me quedo con tres excelentes colecciones de cuentos que van desde un clásico (y uno de mis autores preferidos) del terror hasta quien, en mi opinión, es uno de los mejores nuevos exponentes del género, pasando por una muy buena antología de mujeres autoras y pioneras de la ciencia ficción.

*

 

El valle perdido y otros relatos alucinantes / Algernon Blackwood

(Perla Ediciones, 2022)

*

A raíz de la liberación de un pájaro enjaulado un hombre ve trastocado su destino, extrañas energías permean los alrededores de una mansión en la que unos hermanos están de visita, un valle que parece estar presente a veces sí y a veces no es el escenario de un encuentro amoroso, una joven cuya inocencia oculta, tal vez, un parentesco con seres que no son humanos revela a su prometido un mundo que éste nunca imaginó, una expedición a la montaña resulta ser, al final, más de lo que parece. Esta antología es una muestra de por qué Algernon Blackwood es uno de los grandes maestros de lo inquietante, de lo ominoso aquí retratado en forma de presencias atávicas casi siempre indefinidas e impersonales. Para aquellos que han leído “El Wendigo”, “Los sauces” o “El hombre al que amaban los árboles” (los más conocidos de entre los cuentos del autor) está claro que, bajo su mirada, en el corazón de lo natural habita siempre algo tan poderoso como aterrador. Los cuentos de este volumen (en algunos casos casi novelas cortas) no son la excepción, y pese a tratarse de historias poco antologadas hacen gala de la misma elegante y bella factura, del mismo dominio de la atmósfera, de la misma prevalencia de una sutil oscuridad. La Naturaleza, casi siempre el elemento central de la narración, es en estas páginas una fuerza elemental, primigenia, un imán hacia el que los personajes sienten una inevitable y, a veces, funesta atracción. “La excentricidad de Simon Parnacute” y “Max Hensig” me resultaron una sorpresa en tanto muestran a un Blackwood que se aleja un tanto de sus temáticas y escenarios más conocidos, aunque, en general, Blackwood parece querer decirnos que hay siempre una verdad oculta en otra parte, un espacio en el que habita no sólo el asombro sino un conocimiento que nos llama a cruzar el umbral e ir a su encuentro. Ese llamado, sin embargo, conlleva al mismo tiempo una advertencia, como si lo natural en todo su esplendor fuera también la cuna de fuerzas primitivas que, quienes se acercan demasiado, corren el riesgo de no saber dominar. ¿Qué hay más allá de esos portales presentes en jardines, montañas o valles? Eso no lo sabemos a ciencia cierta. En ocasiones aparecerán sátiros, faunos, altares paganos, hadas o centauros; en otras, muchas, se trata sólo de los bosques, de las montañas, de los árboles, de los parajes que, en su majestuosidad, esconden y encarnan a la vez lo bello y lo terrible. Preciosa edición de un autor enorme y de una obra imprescindible.

 

*

Mundos alternos. Selección de cuentos escritos por las pioneras de la ciencia ficción del siglo XX a partir de El futuro es mujer / Lisa Yaszek (antologadora)

(Almadía, 2022)

*

Una madre que, en un contexto en el que su marido se expusiera a fuertes dosis de radiación, sólo espera que su hija recién nacida sea normal, un grupo de alienígenas muy parecidos a los humanos (aunque dotados de extraños poderes), una mujer entrenada por un mago que, acaso, sea también su creador, un científico incapaz de valorar los esfuerzos intelectuales de su esposa (al menos en esta dimensión), un niño mutante y superdotado que lo único que quiere es disimular su condición, una guerrera de armadura y espada capaz de ir a los mismos infiernos o a otra dimensión con tal de cobrar su venganza. Este primer tomo de El futuro es mujer, antología de siete cuentos seleccionados por la académica y especialista en ciencia ficción Lisa Yaszek y traducidos por el colectivo de traductores Falsos Amigos, cumple lo que promete al ofrecer un buen acercamiento de conjunto a las pioneras de la ciencia ficción norteamericana a través de textos que varían lo mismo en tema que en estilo. Si bien el título anuncia que se trata, en este caso, de cuentos unidos bajo el rubro de “mundos alternos,” dicha alteridad no es, sin embargo, siempre de carácter espacial: en ocasiones el mundo de la historia es el nuestro, o uno muy parecido, y es el personaje el que pareciera anclado a una otredad que lo agobia y que, a menudo, le impide encajar y ser parte de la normalidad. Pese a la variedad de las historias en éstas predominan las preocupaciones propias a los años de la posguerra y al entorno geográfico y temporal de las autoras, en particular la amenaza nuclear y las mutaciones asociadas a la misma, así como la presencia y posibilidad de otras civilizaciones que podrían entrar en contacto con la nuestra. Este hecho, por otro lado, pareciera a ratos impedir que una conecte con los cuentos y lo que en ellos se narra, o al menos así me ocurrió a mí. Mis favoritos personales (“El beso del dios negro” y “La estación de Mr. Sakrison”) fueron, curiosamente, los dos textos que más me parecieron alejarse de ese entorno norteamericano tan de la época y consiguen construir, en cambio, atmósferas más atemporales, más imaginativas y, por ello, de carácter más universal. Destacan, por otro lado, la presencia de personajes femeninos fuertes y, en retrospectiva, la clara preocupación por temas que tal vez sólo terminarán de florecer más tarde pero que tienen aquí un antecedente contundente: el rol de la mujer en una sociedad donde el poder es con frecuencia masculino, la preocupación por el entorno y los daños que le causamos, la voluntad de acercamiento con el que es diferente. Me pareció curiosa la introducción de la antologadora, la forma en que ésta intenta desmontar (o al menos poner en duda) lo que ella considera suposiciones erróneas, casi “mitos” en torno a la presencia de las mujeres en la ciencia ficción, en particular respecto a la recepción de material escrito por mujeres en las principales revistas de la época. No me quedó claro si vendrán más volúmenes, pero bien valdrá la pena esperarlos así sea porque, como éste, reunirán en un libro accesible algunos textos fundacionales que, de otra forma, no existirían en traducción al español. Una antología variopinta que, no obstante, seguramente gustará a los incondicionales de la ciencia ficción.

 

*

Un lugar mejor / Michael Wehunt

(Dilatando Mentes, 2017)

*

Dos niñas sobre quienes ha caído una extraña (y sangrienta) maldición, un escritor a quien un misterioso texto revela poco a poco la aterradora verdad sobre su madre, una niña que, abusada por su padre, encuentra en el fantasma de un músico una inesperada salvación, un grupo de amigos se adentra en una casa embrujada para realizar un documental, dos camioneros se ven confrontados a extrañas voces en la noche, un matrimonio en crisis ante un demonio al que es preciso acoger o expulsar. No sé cómo hacerle justicia a este libro sino diciendo, desde ya, que es lo mejor que he leído en mucho, mucho tiempo. Las once historias de Un lugar mejor atinan a conjugar una excelente técnica narrativa con nuevas interpretaciones del espanto, ofreciéndonos al mismo tiempo lo lírico y lo terrible, lo espeluznante y lo conmovedor, la poesía y el horror. Las historias de Wehunt evocan muchos temas clásicos del género de terror y, sin embargo, no se parecen a nada de lo que yo haya leído con anterioridad: hay aquí mujeres que caen del cielo, cascadas de sangre, demonios en forma de larvas, un Cristo por demás aterrador, voces que son no las de los muertos sino las de los vivos a los que más queremos. El giro que el autor sabe darle a la idea de lo terrorífico, junto con el carácter único de los monstruos que crea y la habilidad con la que se nos narra la historia hacen de este libro un imperdible para los amantes de lo insólito, lo extraño, lo que da miedo, los buenos cuentos sin más. Aquí la casa embrujada reserva una sorpresa que no es la de la clásica historia de su tipo, a ese Jesús que escucha nuestras plegarias no nos lo querríamos encontrar por nada del mundo y la posesión diabólica, sin perder su rostro reconocible, cobra en estas páginas un giro nuevo, inusual. No recuerdo la última vez que leí un libro con un contenido que me asombrara tanto y que, a la vez, me asustara de verdad. Mis cuentos favoritos, “Un lugar mejor” y “La quedada fílmica de octubre: bajo la casa”, me pusieron los pelos de punta y, como ocurre con todo buen cuento, ya quiero leerlos otra vez. La edición es bellísima, ilustrada con imágenes a colores, salpicada de citas de Lovecraft, Aickman, Machen, como si el autor no tuviera empachos en darnos una suerte de hoja de ruta de sus referencias y de su inspiración personal (al final, por cierto, y por si lo anterior fuera poco, el propio Wehunt nos ofrece su propia lectura de sus historias y de lo que intentaba lograr con ellas). Un libro perturbador, admirable, deslumbrante a la vez que original. Por ahí leí que el autor está escribiendo una novela. No sé ustedes, pero yo quiero leerla desde ya.

****

Alma Mancila

Escritora y lectora voraz. Antropóloga en otra vida. Autora de los libros de cuentos Casa encantada (Instituto Mexiquense de Cultura, 2011), Las babas del caracol y otros relatos(Instituto Mexiquense de Cultura, 2014 / Lugar Común Editorial, 2019), El criado y otras historias de aflicción (Bitácora de vuelos ediciones, 2020) y de las novelas Hogueras (Editorial Terracota, 2013), Archipiélagos (UAEM, 2015), De las sombras (INBA/Lectorum, 2018), El predicador (FOEM, 2019) y Fulgor (Malpaso/Salto de página, 2022). Ganadora del Premio nacional de cuento Juan José Arreola 2022 con Los intrusos. Miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte.

Facebook: https://www.facebook.com/alma.mancilla.9

¡COMPÁRTELO!

Sólo no lucres con él y no olvides citar a la autora y a la revista.