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Bitácora de Navegación del Nautilus 20

LA HEBRA EN EL OJAL

 

Marina Ortiz

 

Cuando tomo el tejido entre mis manos, un trance calmo y cíclico toma posesión de mí. El entramado es una superficie creada por el enlace de un hilo o varios. La hebra se enreda en sí misma, forma túneles y puentes, ventanas y secretos. Aprendí a tejer y bordar en mi infancia, con mi abuela paterna y en la escuela. Es una costumbre común en los hogares, en especial para las mujeres. Mi madre y mis hermanas también cosen, bordan y tejen.

Como muchos otros temas en mi vida (el ambientalismo, las películas de acción,o el melodrama), viro a la literatura y al lenguaje para profundizar mi afición por el tejido. Existe un paralelismo teórico entre lo textil y lo textual, pero su relación es más ancestral y profunda —la etimología evidencia su origen común. Si le debemos al teórico Roland Barthes una de las más maravillosas propuestas teóricas sobre el tema (miren sus bellas palabras: “el texto se hace, se trabaja a través de un entrelazado perpetuo; perdido en ese tejido —esa textura— el sujeto se deshace en él como una araña que se disuelve en las segregaciones constructivas de su tela”), no así su originalidad[1].

Existen muchas figuras mitológicas sobre el tejido. Me enfocaré en la mitología griega por la obra que abordaré más adelante. Sí, está Penélope, Aracne y Ariadna, pero las Moiras son las que más me fascinan por ahora. Como las Nornas de la mitología nórdica, las Moiras son las tejedoras divinas que presiden sobre la vida humana. Cada una se responsabiliza por una etapa del proceso textil y de su paralelo vital (nacimiento-transcurso-muerte). Ellas ordenan la vida, es decir que dan orden y sentido al tiempo vivido. Hijas de la noche (en una versión del mito), su poder impera por encima de las potestades del Olimpo (hay otra versión más patriarcal que las somete al gobierno de Zeus).

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The Three Fates (Christopher Stuart, 2004)

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Me parece maravillosa la distinción entre el tiempo y su organización: del caos, de la oscuridad, de lo impreciso y abstracto que es el tiempo surgen las manos que proveen visión aprehensible. El tiempo es algo más grande que la vida humana, consonante con la inmortalidad de los dioses y la permanencia del espíritu, pero los hilos de las Moiras lo hacen tangible y comprensible y forman una visión más intricada, fluctuante y material del tiempo. Una red, el entramado. Difiere de las visiones monoteístas que enaltecen tanto lo sobrenatural hasta dejarlo impenetrable, inaccesible e insondable; sólo con la fe se solventa el abismo, el silencio que la deidad impone, y apenas con metáforas pueden “acercarse” a “entender” el rostro de la perfección infinita. Con la mitología griega el tiempo se elucida propio para cada criatura. Finito, concreto y movilizado para los humanos. Un objeto. Las Moiras tocan, ven, urden, toman y cortan. Lo sobrenatural, en realidad, se puede vislumbrar y acariciar. Se puede conocer. Oráculos, sueños, ritos, señales divinas, trances, ¡encuentros con los dioses y el descenso al inframundo! Tales son los canales que conceden conocimiento y certeza.

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¿Qué hace el humano que consigue saber su destino?

Un ejemplo: la novela Lavinia (2008) de Úrsula K. Le Guin. Extiendo la visión griega sobre este contexto pre-romano por la consonancia mitológica. Personaje menor en la Eneida, joven hija del rey Latinus de Laurentum, Lavinia es responsable de llevar a cabo los ritos y honores para los dioses de su región. En una visita nocturna que realiza con su padre a un claro sagrado en el bosque, Lavinia despierta para encontrarse frente a una sombra, un poeta en proceso de muerte. La sombra resulta conocer su historia, su tierra y su destino. Después de todo, él la escribió. Así que entiende lo ineludible, e irónico, de la situación: él enhebró la vida de Lavinia y sabe los efectos que detonaría si se la revela. Compelido por sentimientos de rectificación, humildad y necesidad, el poeta le cuenta, con mesura y cautela, la historia del héroe Eneas, troyano errante, sus luchas, viajes y la búsqueda de su tierra destinada. De la guerra que se detonará por la sabia resistencia de Lavinia a casarse con el príncipe incorrecto, porque está destinada a amar a ese héroe extranjero.

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La decodificación de lo sobrenatural demarca el camino que los personajes deben seguir. Y apuntan a una idea interesante: la consciencia del futuro no elimina la libertad de la voluntad. Es un vericueto teológico muy discutido si la consciencia del futuro anula el libre albedrío, y tal conclusión tiene su justificación y validez. Pero Lavinia, al conocer el hilo de su vida, no siente que su voluntad la abandona ni que es menos dueña de sí misma. Por el contrario, parece que se reafirma su sentir y su pensar. El sentido de su vida está lleno de luz y viento. La consciencia del propio destino provoca en ella una reluciente e inusual valentía. No es una contradicción, sino otra forma diferente de entender el tiempo. No como una línea, sino como una red infinita.

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La sabiduría de Lavinia proviene del entendimiento y la aceptación de su parte del entramado. El desconocimiento del tejido confunde e intimida, su esclarecimiento confirma y tranquiliza. El poeta no fue capaz de verlo. Pero Lavinia elige acariciar el hilo, y el de otros, ver sus rumbos para luego soltarlos, porque su responsabilidad no es enhebrar o cortar, sino vivir.

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[1] La lista para indagar las primeras referencias teóricas o alegóricas entre el texto y el tejido sobrepasan la capacidad, y la intención, de este espacio. Si es de su interés conocer más, le comparto las fuentes que yo consulté que ilustran este amplio panorama. Es claro que la milenaria tradición del tema nos demandaría mucho tiempo y esfuerzo de abarcar:

  1. Gamba, Julieta (2012). Cecilia Vicuña: Trama y urdimbre de la palabra: el tejido/texto.
  2. Deyermond, Alan (1999) El tejido en el texto, el texto tejido: las chansons de toile y poemas análogos.

 

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Ana Marina Ortiz Baker

Soy de Monterrey, Nuevo León, México.

Desde la licenciatura estudio la ciencia ficción y la fantasía, y estoy por terminar una maestría en Literatura Hispanoamericana.

Mi tesis de investigación fue sobre el cyberpunk mexicano, en específico el tema del espacio y su relación recíproca con los personajes.

Me gustan los temas del cuerpo, la mujer, la ciudad, los mitos, la magia y la naturaleza.

Los conocimientos que tengo, que son un tesoro para mí, aún tienen mucho que crecer.

Twitter: @maro_baker

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