PLEASE COME HAUNT ME
Margarita Aurora González Ramírez
En varios países de Europa del norte, como Alemania, Dinamarca, Irlanda, Reino Unido o los Países Bajos, hay casos de cuerpos de personas muertas que se conservan muy bien de manera natural debido a las condiciones particulares del agua de esa zona, como poco oxígeno, temperatura muy baja y acidez, así como al contacto con un tipo particular de musgos: los musgos de turbera. A tales momias se les conoce como momias del pantano.
Una característica muy llamativa de las momias de pantano es que se les oscurece el tono de piel. También son peculiares porque, aunque la piel y algunos órganos están bien conservados, los huesos se han desintegrado; lo mismo ocurrió con algunas de sus ropas. Por ejemplo, el Hombre de Tollund fue encontrado en Dinamarca desnudo y portando un cinturón, ya que la ropa que vestía se desintegró.
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La evidencia indica que muchos de estos cuerpos pertenecen a personas que murieron al caer y ahogarse accidentalmente en los pantanos, aunque hay otros que muestran signos de una muerte violenta en tiempos prehistóricos o a inicios de la época moderna. Además, se ha descubierto que estas muertes violentas pueden estar relacionadas con rituales más que con peleas o batallas y que algunos de estos cuerpos pertenecían a personas con discapacidades físicas o padecimientos mentales.
Supe de la existencia de las momias del pantano gracias a la novela My Darling Dreadful Thing (2024), de Johanna Van Veen. Ella es una escritora neerlandesa conocida por su obra en la que aborda el horror gótico sáfico, y en My Darling… narra la historia de una chica, Roos, que ve fantasmas y que además es poseída, cuando ella lo permite, por una fantasma. La novela consta de 35 capítulos, de los cuales 17 corresponden a los archivos médicos del doctor Montague, un psiquiatra contratado por la policía, en los que conversa con Roos para entender lo que ocurrió, pues es acusada de un crimen y ella se empeña en decir que no es culpable y que la víctima murió por amor.
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La historia se desarrolla en 1950, en los Países Bajos. Ahí, Roos Beckman es una chica de 21 años cuya vida ha sido difícil, ya que a corta edad su padre, un marinero, la entregó a una mujer a quien ella llama “mamá” y que dirige sesiones espiritistas aprovechándose de las capacidades de Roos. “Mamá” maltrata a Roos de muchas maneras. Por ejemplo, con el pretexto de castigarla por cosas que hace mal, la obliga a dormir entre las tarimas del piso y la deja sin comer. Todo esto, además de ser pensado como un castigo, es la manera en la que “mamá” conserva el aspecto enfermo y aniñado de Roos, porque eso es conveniente para la imagen que debe mantener ante los clientes.
Roos es indispensable para las sesiones, ya que habla con los espíritus y, al mismo tiempo, es poseída por ellos. Sin embargo, aunque Roos sí ve fantasmas y tiene un espíritu de compañía llamada Ruth, no puede contactar a otros espíritus, sino que ella y Ruth son quienes se encargan de todo el espectáculo. Ruth entra al cuerpo de Roos através de su boca y se apodera de ella, siempre y cuando esta última se lo permita.
Ruth, la fantasma de Roos, murió varios siglos atrás de manera violenta, por ello, algunas veces, Roos la ve con una soga alrededor del cuello. Su cuerpo se conserva en el pantano, lo que la ató a este mundo, y de esa manera consiguió despertar de su sueño de muerte, pero convertida en fantasma. Es importante aclarar que este tipo de fantasmas, como lo plantea la autora de la novela, pueden tardar muchos años en despertar y, cuando lo consiguen, suele deberse a que han escuchado la tristeza de algún mortal. Ruth despertó al escuchar el llanto de Roos.
A los fantasmas como Ruth les gusta la sal; disfrutan de las lágrimas y de beber sangre. La apariencia de Ruth cambia: algunas veces su ojos tienen un destello verde, otras no tiene ojos, solo piel donde se supone que estarían los ojos. En cuanto al color de su piel, algunas veces se ve café y otras de color negro. También tiene la mandíbula dislocada. En algunas ocasiones, Ruth puede ser percibida por Roos mediante el tacto y la vista. Su tacto es frío, como las piedras.
Ruth puede parecer humana, pero murió hace tanto que ha olvidado lo que es ser humana. Fantasmas como Ruth, que no recuerdan su vida y tampoco su nombre, reciben el nombre que les da la persona a la que quedan unidas. Es importante mencionar que no todas las personas pueden ver a este tipo de fantasmas y que quienes toman medicamentos no pueden percibirlos porque sus sentidos han sido alterados.
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Para que Roos y Ruth se conectaran bastó un poco de la sangre de Roos, la cual cayó accidentalmente cerca de la fantasma; así, ésta la bebió. De esa manera, ellas quedaron unidas y Ruth le informó a Roos que se encargaría de mantenerla a salvo. Así inicia una historia de apoyo y cariño entre ellas, lo que prevalecerá a pesar de las dificultades que se atraviesan en su camino, así como de las decisiones que ambas tomarán y que podrían alejarlas definitivamente.
Posteriormente, Roos conocerá a Agnes Knoop, quien también tiene un espíritu de compañía de nombre Peter Quint. No es gratuito que Agnes haya nombrado a su fantasma con el nombre del personaje de Una vuelta de tuerca, de Henry James.
Ruth y Peter no son los únicos fantasmas que rondan las páginas de esta novela, hay por lo menos uno más y Roos espera que aparezca otra fantasma, la más importante para ella, su amor. El título de esta columna se basa en las palabras que Roos pronuncia, esperando que su amor la encuentre. En el fondo, esta novela de fantasmas es, como muchas veces, una historia de amor.
Por último, quiero mencionar que, como ocurre en las novelas góticas, hay secretos del pasado que pesan mucho y que no deberían ser descubiertos; también hay violencia hacia personas que, como Roos o Agnes, se les acusa de padecer algún trastorno mental por ser diferentes. La mayor parte de los personajes de la novela son femeninos y veremos cómo algunas de ellas son víctimas de prejuicios y de racismo.
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Margarita Aurora González Ramírez
Licenciada en Lingüística y Literatura Hispánica y maestra en Literatura Mexicana por la BUAP.
Ha tomado talleres de escritura. Diplomada en Literatura Fantástica y Ciencia Ficción por la Universidad del Claustro de Sor Juana.
Actualmente es maestrante en Escritura Creativa en la Universidad de Salamanca.
Escribe y lee acerca de monstruos y de terror.
https://www.instagram.com/lavoraginedeeos/
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