Seleccionar página

HANNIBAL LECTER

el caníbal en su laberinto

 

Lorena Loeza

 

 

Basado en las novelas de Thomas Harris y colocado en el imaginario colectivo gracias a la cinta con la actuación de Anthony Hopkins y la dirección de Jonathan Demme, el Dr. Hannibal Lecter es, sin lugar a dudas, uno de los asesinos en serie ficticios más populares en la historia del cine y la literatura.

hannibal3

Hannibal Lecter, como personaje, es seductor gracias una perturbadora mezcla de refinamiento y brutalidad. Nadie como él para ejemplificar la sutil manera en que lo sublime y lo profano pueden formar una combinación que provoca una profunda sensación de horror. Y si a eso se agrega que Lecter practica el canibalismo -uno de los tabús más escandalizantes para las sociedades contemporáneas-, el asunto está puesto para generar diversas forma de aversión que, sin embargo, te dejan siempre con ganas de saber y ver más.

Es quizás por ello que hoy por hoy tengamos tres tipos distintos de Hannibal Lecter: el personaje literario, el cinematográfico y el televisivo. Y no sólo se trata de lenguajes diferentes,  la verdad es que existen diferencias significativas entre cada uno, derivado no precisamente del desarrollo y evolución del personaje y la historia, sino  que en ello acabaron influyendo asuntos de créditos y posesión de derechos.

En estricto principio, hay que iniciar por recorrer la serie de novelas en donde el personaje se origina. Hannibal Lecter “nace” como personaje secundario en El dragón rojo (The Red Dragon), novela de corte “thriller” policiaco escrita por Thomas Harris en 1981. Lecter tiene un papel que, sin ser central, es tan importante para la historia y tan intrigante en sí mismo que Harris entiende que se verá obligado a desarrollarlo en un futuro. Es así que para El silencio de los inocentes (Silence of the Lambs, 1991) Lecter es más que una presencia perturbadora, por lo que para el siguiente libro Harris lo toma ya como figura protagonista central (Hannibal, 1999). Esta visión de Lecter en libertad en Europa marca también el principio de ruptura entre los libros y las películas, ya que para la versión fílmica el final se modifica tanto que no admite secuencias sin entrar en francas contradicciones con la versión literaria.

Para estos entonces, y después del suceso cinematográfico que representa la cinta de Jonhatan Demme (Silence of the Lambs, 1991), Dino y Martha de Laurentis compran los derechos para las adaptaciones fílimicas sobre el personaje, e inician la producción de una nueva cinta, contratando a Ridley Scott para filmar Hannibal (2001) y  después a Bret Ratner para filmar El dragón rojo (2002).  No era la primera vez que la primera de las novelas se filmaba (Michael Mann había filmado Manhunter en 1986), pero digamos que ante la imposibilidad de continuar las historias sin caer en contradicciones entre los libros y las películas, la compañía fundada por Dino de Laurentis decide ir hacia atrás en el tiempo.

Pero el personaje ya era muy popular y las demandas de los fans para saber más de él obligan a tomar medidas interesantes. Harris escribe entonces sobre la infancia y juventud de Lecter en Hannibal Rising, publicada en 2006 y dirigida por Peter Webber para la pantalla grande (siempre bajo producción de la casa Laurentis) en 2007.

Llegado a este punto, hay que decir que hay omisiones en las películas que hacen que el Lecter literario y el cinematográfico sean muy distintos. La principal de ellas, la creación del palacio de la memoria, un lugar construido en la mente de Lecter que es importantísimo para entender su mundo interior y su naturaleza sicótica y que es ampliamente descrito en las novelas. También es útil para entender su relación con las mujeres, uno de los rasgos más complejos de Hannibal que se expresa tanto en su alto grado de refinación como en la frialdad  y sadismo con que planea sus asesinatos. Sin embargo en las cintas  el asunto es omitido, sólo hay una referencia superficial acerca del asunto. Cuando Hannibal es visitado por Clarice en el hospital siquiátrico, él pronuncia la frase: “a falta de una ventana tengo memoria” sin ahondar más en el tema.

hannibal2

A estos dos tipos de ver a Hannibal hay que agregar un tercero: el televisivo. Dado que no es posible continuar la historia (creo que nunca sabremos si Hannibal y Clarice dejaron de huir, siguen juntos, tuvieron hijos… por lo menos es difícil que lleguemos a verlo en la pantalla grande), Martha de Laurentis produce una serie para la NBC que narra la historia de la amistad y el estrecho vínculo entre Hannibal Lecter y William Graham, el hombre que finalmente lo atrapa y lo confina al hospital siquiátrico, donde lo conocimos en El dragón rojo.

La serie no está basada en alguna novela, hace una recreación de cosas que se mencionan en los libros publicados. Hannibal está interpretado por Mads Mikkelsen, sumando con él cinco los actores que han interpretado el personaje, aunque la verdad es que el único que nos viene a la mente siempre es Anthony Hopkins.  Lo interesante de la serie es que está centrada en la famosa habilidad de pensamiento de Graham para hacer empatía con el asesino, la cual Lecter manipula hasta casi llevarlo a la locura.

En fin, el Lecter literario es el más complejo, el cinematográfico el más carismático y el televisivo definitivamente el más sofisticado. Y si no has leído los libros o sólo has visto alguna de las cintas, aquí las cinco cosas básicas que hay que saber de nuestro sicópata más refinado:

hannibal11.- Hannibal tiene ascendencia noble. Es el octavo Conde Lecter, descendiente del llamado Hannibal el Macabro en su natal Lituania.

2.- Tiene una malformación congénita. Nació con seis dedos en la mano izquierda y aunque le fue extirpado, en radiografías se observa el nacimiento del sexto dedo. Eso y un extraño brillo rojizo en sus ojos (parecido al de las ratas) se consideran rasgos inequívocos de su identidad.

3.- Entre algunas de sus lecturas y pasatiempos favoritos están el Dictionnaire du Cuisine de Alejandro Dumas, el documental Breve Historia del Tiempo, narrado por Stephen Hawking y la música de Bach.

4.- Respeta a las mujeres y no las ataca de ser posible. La única víctima femenina que hay en los libros es una enfermera del hospital siquiátrico a la que hizo perder un ojo.

5.- Si Hannibal todavía vive, tiene alrededor de 79 años; la última vez fue visto en la ciudad de Buenos Aires, saliendo de la ópera en compañía de Clarice Starling.

****

lorenaNorma Lorena Loeza Cortés

Es Profesora de educación preescolar por la Escuela Nacional de Maestras de Jardines de Niños, Licenciada en sociología y Maestra en Estudios Latinoamericanos por la Facultad de Ciencias Políticas en la UNAM. En el año 2000 recibió la medalla Alfonso Caso al Mérito Universitario, por parte de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM.

Ha sido profesora e investigadora en universidades públicas y privadas, en organizaciones de la sociedad civil y el sector público.

Ha presentado ponencias en foros nacionales e internacionales en temas sobre análisis de presupuestos públicos, educación, salud, jóvenes, incidencia política y análisis cinematográfico.

En 2011, participó en la publicación colectiva “Femmes Fatales, 13 escritoras hablan de cine de terror” coeditado por Editorial Samsara y Festival Macabro. Actualmente, también  es colaboradora en Corre cámaraArtes 9 y Cineforever, sitios electrónicos especializados en Análisis Cinematográfico y  de arte multimedia