Seleccionar página

EXORCIZANDO DEMONIOS Y EXPULSANDO ESPÍRITUS

un manual práctico

Mariana Esquivel

Hay en el mundo cierto número de libros (nunca más de catorce,
nunca menos de siete) cuya naturaleza es tal que vuelve prescindible
cualquier otra lectura.

Emiliano González

 

En esta vida todos pasamos por momentos en los que algunas situaciones o problemas nos hacen sentir que ser perseguidos por Michael Myers o Jason Vorhees serían opciones preferibles a tener que enfrentar aquello que sea lo que nos aqueje. En esos momentos de vulnerabilidad muchas personas recurren a ciertos objetos, cuya simple mención hace que me estremezca de horror, que un escalofrío recorra mi espina y que gotas de sudor frío escurran por mis sienes: me refiero a los libros de superación personal.

supera

No negaré que, en tiempos de oscuridad, uno echa mano de lo que puede para salir del bache y, si un libro brinda el consuelo necesitado, pues qué mejor (peor es el caso de aquellos que caen en el fanatismo provocado por sectas de cualquier denominación religiosa). Sin embargo, querido lector de Penumbria, presumo que perteneces al mismo equipo que yo y que las palabras de Walter Riso (o peor aun, de Gaby Vargas) no son precisamente a lo que se te ocurriría recurrir en esos momentos en que tu estado de ánimo podría ser equiparable con el de una víctima del más sangriento método de tortura de la Santa Inquisición.

Hace poco, cual Dante, me encontré perdida en medio de una selva oscura en el camino de mi vida, pero, en lugar de que un solo Virgilio viniera a conducirme en mi descenso al infierno, tuve la fortuna de que muchos y muy diversos guías aparecieron para ayudarme a recorrer el trayecto. Comparto con ustedes sus identidades para que –si en algún punto los necesitan- puedan echar mano de ellos tal como lo hice yo y para que nunca tengan que recurrir a libros de superación personal. Escuchen, pues, mi buena nueva (si acaso no la sabían de antemano): la respuesta a cualquier problema está en nuestros géneros favoritos, la literatura fantástica y de terror.

portada el exorcistaAsí, llego a mi primer gurú de la superación, William Peter Blatty con su libro El exorcista. No creo que les parezca tan poco ortodoxo que compare la depresión/enojo con una posesión demoniaca: reacciones que no se pueden controlar, cambios en la personalidad y ese sentimiento de que no eres tú mismo. En esta historia, la pobre Regan experimenta un verdadero calvario al ser poseída por Pazuzu, y si algo queda claro es que liberarla del espíritu maligno no va a ser nada fácil. De hecho, para lograr que la protagonista vuelva a la normalidad, tienen que morir en el proceso tanto el padre Merrin como el padre Karras. Entonces, la lección de nuestro primer maestro es que no va a estar fácil y que van a haber daños colaterales, pero de que se puede sacar al demonio, se puede.[1]

bram-stoker-dracula-1En el siguiente círculo del infierno nos espera Bram Stoker, por supuesto con su magistral Drácula. El irlandés no deja lugar a dudas: si quieres acabar con el problema, tienes que acabar con él de raíz… o más bien clavarle una estaca en el corazón y cortarle la cabeza. De otro modo, el vampiro/problema va a seguir levantándose de su tumba cada noche a succionar tu sangre hasta consumirte por completo. Así que nada de dejar las cosas a medias, hay que estar decidido a abrir el ataúd y llevar a cabo el proceso, aunque nos salpiquemos un poco de sangre.

Una vez resignados a que el proceso va a ser largo, doloroso y que varios y diversos fluidos corporales van a ser derramados, llegamos al tercer guía de nuestro recorrido: Edgar Allan Poe. En “El corazón delator”, el protagonista, a pesar de que sabe que su crimen fue casi perfecto, escucha los latidos del órgano extraído de su víctima y está convencido de que serán lo que lo ponga en evidencia con los oficiales de policía que lo interrogan. La lección de superación de problemas en esta historia tiene que ver con el hecho de que mientras no hablemos de éstos, el corazón extirpado va a seguir ahí, latiendo cada vez más fuerte hasta que nos haga enloquecer.

CORAZN~1

Finalmente, nuestro último guía en este recorrido infernal es otro irlandés: Oscar Wilde. En “El fantasma de Canterville” encontramos un alma en pena que se niega a abandonar este mundo y que está decidida a sacar a la familia Otis de su casa, buscando propinarles un buen susto. Las apariciones del pobre espectro no tienen el efecto deseado en la familia y, es más, aprenden a vivir con ellas. Sin embargo, no es hasta que la joven Victoria se apiada del espíritu y derrama unas lágrimas por él que éste puede descansar en paz. ¿Qué nos dice esta historia? Fácil, que el problema puede permanecer ahí, cual alma en pena, rondándonos día y noche hasta que se convierta en parte de nuestra cotidianidad, pero si de verdad queremos que la mancha de sangre deje de aparecer cada mañana, tenemos que perdonar y dejar ir.

canter

Ya sé, eso suena muchísimo a libro de superación personal, pero véanlo en términos espectrales y en serio no suena tan ridículo.

Se dice mucho más fácil de lo que en verdad es. Al fantasma de Canterville le costó años de vagar en pena antes de lograr que alguien le concediera el perdón, al protagonista de la historia de Poe su confesión le costó la libertad y a Jonathan Harker casi le cuesta su vida y la de su amada Mina deshacerse de Drácula, pero al final todos lo lograron. ¿Por qué habría de ser diferente tu caso?

No me voy a poner (más) cursi, lo prometo. Lo que quiero decir es que la literatura fantástica no representa únicamente un “escape de la realidad” como tantos de sus detractores aseguran. Por el contrario, es un género que brinda la fuerza y armas necesarias para enfrentar problemas y seguir adelante, ya sea interpretándolos como si se exorcizaran demonios, se cortaran cabezas, destruyeran anillos de poder o un extremadamente largo etc. Tampoco estoy diciendo que este género tenga como verdadera intención fungir como literatura de superación o manual del Club de los Optimistas y que debamos buscar exhaustivamente subtextos y significados ocultos en sus líneas. Nada más alejado de la realidad. Mi único propósito es –como dije al principio- brindar una alternativa para esos momentos de crisis en los que a veces nos encontramos. Si te sirve la interpretación para salir del bache, querido lector, no tienes más que buscarla y usarla. A mí me funcionó.


[1] El vómito verde es completamente opcional pero sus propiedades catárticas y liberadoras pueden resultar de mucha ayuda.

 

****

marianaMariana Esquivel (Vikinga)

Tesista de Ciencia Política y Relaciones Internacionales. Perito técnico en Criminalística. Estudio ruso, alemán y francés. Historiadora frustrada. Apasionada del cine y la literatura de horror. El folk metal es lo mío. Valkyria que lleva a los guerreros caídos al Valhalla.

http://valkyrjainvelvet.blogspot.mx/

@Marian890

Canal de YouTube.